EM., VCyT., 27-05-13.
Panel de expertos reunido en Bonn advierte que "Sin
reformas importantes en el corto lapso de una o dos generaciones, la mayoría de
los 9 mil millones de personas en la Tierra enfrentará una fuerte y
grave presión sobre el agua dulce, recurso natural indispensable e insustituible. Esta carencia será autoinfligida y es, a nuestro juicio,
totalmente evitable".
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Así lo señala el párrafo clave de la declaración de
Bonn, documento emitido el pasado viernes 24-04-13 por los 500 científicos de
que asistieron a la cumbre "El agua en el Antropoceno", que durante
cuatro días analizaron el estado de ese recurso clave en el planeta.
Durante la cita, convocada por The Global Water
System Project (GWSP), organización internacional dedicada al tema con sede en
la ex capital germana, los investigadores reconocieron que los sistemas de agua
dulce se encuentran en un estado precario.
Según la declaración redactada por los científicos,
la mala gestión, el uso excesivo y el cambio climático son una amenaza a largo
plazo para el bienestar humano.
Al respecto, Anhik Baduri, director del GWSP señaló
que el mayor problema para la humanidad es la agricultura, que es la actividad
que más agua utiliza y de forma que calificaron como muy ineficaz.
Dijo, por ejemplo, que actualmente la humanidad
utiliza un área del tamaño de Sudamérica para cultivo y un área del tamaño de
África para criar ganado.
A ello se suma que se ha construido el equivalente a
una presa de grandes proporciones cada día desde hace 130 años y que decenas de
miles de grandes presas están distorsionando el flujo natural de ríos, lo que
afecta a ecosistemas que han existido durante miles de años.
Durante la conferencia se denunció el creciente
drenaje de humedales, con lo que además se destruye una barrera natural contra
las inundaciones.
Sobre este último punto, el panel determinó que
muchas crecidas de ríos están enlazadas con la actividad humana.
Los investigadores formularon una serie de
recomendaciones para enfrentar el problema, incluyendo adoptar un enfoque
multidisciplinario en las investigaciones sobre el tema, aumentar el monitoreo
-tanto por los medios tradicionales de observación como por fotografía
satelital-, estimular la innovación tecnológica y de las instituciones a cargo
del tema, y considerar alternativas ecológicas a los sistemas de almacenamiento
e irrigación empleados hoy.